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“La minería no metalífera de la provincia de Buenos Aires tiene un alto potencial para desarrollar”

Entrevista al Sr. José Alfredo Pizone, vicepresidente de la Cámara de la Piedra de la Provincia de Buenos Aires.
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EDITORIAL

Entrevista al Sr. José Alfredo Pizone, vicepresidente de la Cámara de la Piedra de la Provincia de Buenos Aires.

¿Cuál es el presente de la minería en la provincia de Buenos Aires?

Sr. José Alfredo Pizone: Podemos decir que el presente en la minería no metalífera de la provincia de Buenos Aires tiene un alto potencial para desarrollar; ya se comienza a notar un fuerte cambio en el nivel de los despachos en las empresas productoras de piedra triturada. De 90 días a esta parte, la demanda es creciente. El plan de infraestructura de la Provincia es ambicioso, y las empresas se están equipando en la medida de lo posible, para poder cubrir dicha demanda. Y responder así, al fuerte cambio producto del inicio de las obras. A pesar de esto, en los pequeños caleros de Olavarría, no se ve todavía con fuerza este cambio y algunos están pasando situaciones complicadas.
¿Cómo ven su futuro? ¿Con qué expectativas?
J.P.: El cambio para el futuro es positivo en la medida que las obras y los planes se puedan ejecutar. De esta manera, las empresas tendrán asegurada una situación importante y permanente en la demanda, que es lo que permitirá generar nuevas fuentes de empleo, incorporar tecnología, mejorar la sustentabilidad de las empresas del sector y desarrollar un permanente cuidado del medio ambiente.
Buenos Aires fue, hasta las inversiones en minería metalífera, la provincia minera más importante del país. Esto muchas veces fue desconocido y por lo tanto nunca valorado por los gobiernos anteriores, ya que desde el desarrollo de la actividad metalífera, las inversiones en las mismas, colocaron a San Juan y Santa Cruz al tope de la actividad. Sin embargo, Buenos Aires es la que mayor cantidad de empresas mineras tiene en actividad. Creando así, una alta cantidad de puestos de trabajo directos. Junto a Córdoba, es una importante generadora del desarrollo de la minería no metalífera del país.
Gran parte de este plan de infraestructura, pasa por el aporte de estas dos provincias, que abastecen a otras para poder ponerlo en práctica. La piedra, cal y cemento tienen su mayor actividad en Córdoba y Buenos Aires.
¿Qué análisis hacen del desarrollo de esta actividad en la provincia?
J.P.: Al estar recién iniciada la reactivación del sector, podemos decir que la actividad está comenzando a crecer significativamente. Por otra parte, el tiempo es una variable importante. Las empresas deben acomodar su producción a la nueva demanda. Es clave que los Ministerios de Producción, de Interior y Obras Públicas, y de Transporte de la Provincia y la Nación, difundan claramente los planes de obras detallando plazos y volúmenes de necesidades. Todo enmarcado en un calendario de cumplimiento total.
En la Provincia existen reservas por encima de cualquier plan de infraestructura. Y la clave para poder acompañar este cambio es lograr transformar esas reservas en los productos necesarios para las obras de envergadura que se avizoran en el corto plazo. Para esto, las empresas deben disponer de recursos financieros, que le permitan invertir en maquinaria,  programas de capacitación en nuevas tecnologías, en forma inmediata. Y generando por cada puesto directo de trabajo, cuatro puestos indirectos.
Históricamente, la obra pública que es el motor de la actividad, tuvo enormes variaciones positivas y negativas y al no tener asegurada la demanda en forma estable fue imposible encarar planes empresariales para luego satisfacer altas demandas.
¿Cuáles son los principales desafíos que tiene el sector?
J.P.: Los desafíos están enmarcados en lo comentado anteriormente. Poder acompañar este gran cambio en la alta demanda con una tecnificación acorde y con proyectos de alta eficiencia. Ese debería ser el principal objetivo a resolver. Una relación, con la Gobernación, acorde con la importancia del tema, es también una necesidad imperiosa. Creemos que esta nueva Administración entendió que Buenos Aires es una provincia minera y por lo tanto, se debe jerarquizar desde el Estado a la misma. Debemos acordar con las autoridades, tanto provinciales como municipales, planes que sirvan para expandir y hacer más eficiente la actividad. La carga impositiva actual es alta, los municipios con actividad minera cobran adicionalmente impuestos a la misma que están totalmente fuera de contexto y no corresponden con el equivalente que muchas veces no se transforman en mejores adicionales a las comunidades que interactúan con la actividad. Sobre estos puntos trabajamos desde las entidades empresarias, para poder tener una administración de nuestras empresas acorde con la lógica y no ser blanco de recaudaciones para solucionar temas de altos déficit fiscales. Temas claves, sobre los cuales insistimos permanentemente, son la sobrecarga en el transporte y la informalidad en general. En esto, esperamos que la Provincia, que ya mostró un cambio con las señales de encarar este tema de alta prioridad en su agenda, nos acompañe con medidas concretas y en forma inmediata.

¿Podrían informarnos sobre las estadísticas de la industria minera en la provincia?
J.P.: Con referencia a las estadísticas, son un gran pendiente que este nuevo cambio no debería descuidar desde la Administración Pública. La actividad, en lo que hace a la producción de piedra triturada, está en el orden de 18 millones de toneladas al año sólo en Buenos Aires. La cal no es fácil de determinar, pues existen muchos emprendimientos artesanales de difícil medición. Los números del cemento son de público conocimiento y bien difundidas por el Instituto del Cemento Portland Argentino. Con respecto al tema de los puestos de trabajo, podemos comentar que el aumento de los mismos no es significativo, pero si es importante saber que todas las empresas hicieron un gran esfuerzo en el 2016, a pesar de la importante caída en la demanda, para sostener a todo el personal en las mismas.
¿Qué tipo de acciones realizan desde la Cámara para mejorar el desarrollo del sector?
J.P.: Las acciones son diversas, y están orientadas fundamentalmente a la difusión de la actividad de la minería de tercera categoría. Corporativamente, los objetivos están direccionados a fomentar y perfeccionar el desarrollo en la industria de la producción de  áridos atendiendo los intereses comunes de sus asociados. Asimismo, se realizan gestiones ante autoridades públicas de todo nivel que regulan la actividad minera: universidades, industrias usuarias, transportistas, proveedores, otras Cámaras vinculadas con nuestra actividad y el sindicato AOMA (Asociación Obrera Minera Argentina), con el objeto de acordar medidas que permitan mayor productividad, aportar soluciones novedosas en los usos de los productos que generan nuestros asociados en un marco de sustentabilidad y cuidado del medio ambiente. También tenemos participación activa en jornadas, foros, congresos, seminarios, y todo otro vehículo que nos permita fortalecer el sector; siendo también nuestra responsabilidad como Cámara mostrar a la sociedad la importancia y relevancia que tiene para el desarrollo de la misma esta rama de la minería, la más importante en valor económico y volumen del sector no metalífero (rocas de aplicación), como así también sus empresas productoras que son generadoras de empleo, tanto directo como indirecto y motor de progreso y crecimiento en las comunidades en los que se desarrollan las explotaciones.

¿Cuáles son las expectativas para el desarrollo del 3° Congreso Argentino de Áridos?
J.P.: Al igual que los dos primeros Congresos realizados en 2008 y 2014, las expectativas son sustancialmente favorables. El Congreso, una vez más, constituye una oportunidad y una potente herramienta de difusión de la actividad minera no metalífera, generándose al mismo tiempo un espacio adecuado de discusión, debate y aprendizaje de alto nivel académico para el desarrollo de la industria, nuevas tecnologías y aplicación de novedosas soluciones tanto en los usos de los productos, como así también en la resolución de los problemas comunes.
Asimismo, lograr articular y unificar acciones con todos los actores de sector, productores, proveedores, autoridades de organismos de control municipales, provinciales y nacionales, sindicatos, y entidades en general; permiten poder afrontar los desafíos que se avizoran. A partir de este tipo de acciones, nuestra industria debe demostrar que está preparada para afrontar las necesidades que demandará el Plan Nacional de Infraestructura recientemente iniciado y que es un verdadero desafío que impone nuevas metas de crecimiento claras y sostenidas en el tiempo.

¿Sobre qué temáticas se hará foco y por qué?
J.P.: Fundamentalmente se busca generar el momento y lugar para desarrollar tres ejes principales:

  • Empresarial: productores y proveedores dispondrán de tres días dedicados a intercambiar experiencias en resolución de problemas operativos. Los distintos proveedores tendrán la oportunidad de presentar los nuevos avances tecnológicos y de servicios que representen alternativas de mejora en nuestra actividad.
  • Académico: acercar a las empresas productoras al ambiente académico (universidades, investigadores, etc.). Para ello se están solicitando trabajos que estén orientados principalmente sobre cuatro áreas temáticas principales: recurso mineral y producción de áridos; aplicaciones de áridos; ambiente y responsabilidad social empresaria; y marco regulatorio, legislación y proyección de la industria. Los mismos son abarcativos de los temas en los que pretende poner foco nuestra actividad y están orientados a la totalidad de los objetivos que persigue el Congreso.
  • Organismos de control: generar el espacio para que los organismos que regulan esta actividad la conozcan cada vez mejor, buscando alinear a todos los actores en el análisis y solución de los desafíos futuros, anticipándonos mediante buenas prácticas a posibles dificultades.