*Por Pablo Morano, Gerente Técnico de la Dirección de Vialidad de la Provincia de Buenos Aires y Mario Aguirre, Subgerente de Planificación Vial de la Dirección de Vialidad de Buenos Aires.
La importancia de las tareas de fiscalización, ya sean a través de la utilización de balanzas estáticas o dinámicas, radica en que aportan datos fundamentales para la preservación de las inversiones que se realizan en materia de infraestructura vial. Es decir, el deterioro que genera el exceso de cargas en un eje del camión que se esté pesando tiene un efecto exponencial en la calzada: un mínimo exceso incrementa el deterioro del pavimento y acorta la vida útil del mismo.
La Dirección de Vialidad de la Provincia de Buenos Aires, dependiente del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos, viene implementando diversos operativos de control de pesos y dimensiones en las Rutas Provinciales.
Se estima que el pavimento correctamente conservado, a partir de los controles de cargas de los camiones que circulen sobre el mismo, tiene una vida útil mayor a 10 años. Pero este número es variable, dependiendo del porcentaje de sobrecarga existente: tan sólo con un 10 % de sobrecarga, el pavimento pierde 3 años de vida útil, aproximadamente.
En este sentido, y teniendo en cuenta que una de las misiones y funciones de la Dirección de Vialidad es conservar y mantener las Rutas Provinciales, se proyectó un Plan de control de pesos y dimensiones de 30 estaciones, a ejecutarse a partir de la compra de más de 20 balanzas WIM, el cual –se estima- se pondrá en marcha a partir del 2023. Cabe resaltar que el equipo técnico del organismo fue el que analizó los estudios preliminares y se nutrió de la experiencia de otros países del mundo, respecto al modo adecuado y eficaz de realizar los operativos de control. Dichos datos arrojaron que la utilización de las balanzas WIM, es decir aquellas que son dinámicas y que pesan en movimiento sin necesidad de detener el camión, son las más apropiadas y agilizan las tareas de fiscalización.
Situación actual
Durante el 2022, la Secretaría de Comercio Interior aprobó el ‘Reglamento Técnico y Metrológico de Instrumentos Automáticos para Pesaje en Movimiento de vehículos de carretera’. El mismo habilita a multar con balanzas dinámicas, una vez homologadas. En concreto, el reglamento exige la homologación primitiva del equipo y, luego, la realización de una prueba periódica que dé cuenta de su correcto funcionamiento.
Vialidad, actualmente, está utilizando las balanzas dinámicas de manera preselectiva. Es decir, los vehículos de gran porte que tienen exceso de carga son detectados por las balanzas dinámicas, para inmediatamente ser pesados en una balanza estática con la cual se puede efectuar la multa. Esta metodología permite que los operativos sean más ágiles y demoren menos tiempo, a la vez que reducen el margen de error.
Es importante señalar que, de acuerdo a cómo se utilicen las balanzas y la combinación de las mismas, el resultado es variable. Por un lado, pueden ser utilizadas de manera estadística, con el objetivo de obtener datos tales como la cantidad de vehículos que son detectados, la cantidad de carga por eje, cuáles son los camiones que cuentan con sobrecarga, entre otros. Esta es una de las formas en que Vialidad se nutre actualmente de la utilización de las balanzas.
Por el otro, puede producirse una combinación de dos tipos: con una balanza de alta velocidad se realiza la pre selección y con otra estática se multa.
Por último, el fin puede ser punitivo –atendiendo al reglamento antes mencionado- al permitir multar con balanzas dinámicas homologadas. Hacia allí es el camino al que apunta el organismo.
Historia de las balanzas dinámicas en la Provincia
En el año 2005, comenzó a intensificarse el vínculo con la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), ya que la institución y el organismo provincial firmaron un convenio mediante el cual se establecía el trabajo en conjunto en algunos aspectos relacionados al pesaje.
En este sentido, la Facultad desarrolló barras piezoeléctricas para clasificadores de tránsito y determinaron su posible utilización en sistemas WIM. Los objetivos estaban orientados a estimar el peso estático a partir de mediciones dinámicas y en condiciones de campo reales, y determinar el error en el pesado dinámico obtenible con esta tecnología. A partir de este desarrollo, se logró tener dos puestos de pesaje dinámico en la Ruta Provincial 6.
Posteriormente, en el 2017, el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos adquirió las balanzas WIM y fueron instaladas en Rutas Provinciales con el apoyo de la Dirección de Vialidad. Al año siguiente, dichas balanzas fueron transferidas a Vialidad.
En 2019, la Repartición contrató una revisión técnica del estado de las WIM y, en paralelo, la Universidad Nacional de La Plata realizó un informe del estado de situación mundial del uso de este tipo de balanzas.
Es importante aclarar que, actualmente, Vialidad cuenta con cuatro puestos mediante los cuales utiliza las balanzas WIM de manera preselectiva. Es decir, con la balanza dinámica se prevé qué vehículo de gran porte estaría sobrecargado y luego, con una balanza estática, se corrobora y determina cuál es el excedente de peso.
Estos cuatro puestos están ubicados en la Ruta Provincial 1001, en San Pedro; en la Autopista Buenos Aires-La Plata, en Berazategui; y en la Ruta Provincial 88, en Mar del Plata y Necochea.
Según los datos relevados, mensualmente se realizan más de 300 pesajes en distintos puntos del territorio bonaerense. Existe un cierto tipo de carga que circula por la Red Provincial que suele exceder el peso establecido y, por lo tanto, progresivamente deteriora el pavimento, ya que está vinculada a la piedra, al cemento y a los granos. Mientras que, por ejemplo, los camiones que transportan combustible -generalmente- no suelen estar sobrecargados.
Red de control de cargas
Históricamente, la Dirección de Vialidad realiza relevamientos de las Rutas Provinciales, con el fin de determinar el estado de las calzadas. A partir de los datos obtenidos, las y los técnicos de la Repartición pueden identificar los sectores específicos de la Red Vial Provincial donde hay mayor deterioro y aquellos donde el pavimento se encuentra en mejor estado. Esto es importante ya que, teniendo este mapeo a disposición, se puede proyectar obras, realizar reparaciones y optimizar la transitabilidad de quienes circulen por los corredores.
A fin de optimizar la efectividad de los operativos de fiscalización, se trabajó en la definición de una red de control de cargas, la cual permitió clasificar las Rutas Provinciales según la carga predominante que circula sobre ellas. Así se pudo conocer cuáles son aquellas vías donde predomina el movimiento de granos, en cuáles la carga que proviene de las canteras y en cuáles lo producido en las areneras, por citar algunos ejemplos.
Este estudio fue muy importante ya que posibilitó proyectar una Red de control de pesos y dimensiones en puntos estratégicos, con el objetivo de preservar el estado de la Red Vial. De la investigación se desprendieron los siguientes datos: generando cordones o arcos de protección de la zona de los puertos del Atlántico, del Río de La Plata, el área Metropolitana, la vinculación con la provincia de Santa Fe y la zona de Tandil y Olavarría, se abarcan los puntos específicos donde los índices de sobrecarga son mayores que en otros sectores de la Provincia, y esto permite controlar toda la Red Vial Provincial. Poder cubrir esos puntos con puestos de control, aporta al mantenimiento y conservación de las calzadas.
Hacia la implementación del Sistema WIM punible
El Plan de control de cargas dinámico de 30 estaciones que se planea hacer efectivo a partir del 2023 es un proyecto de la Dirección de Vialidad de la Provincia de Buenos Aires, al que se han ido sumando otros organismos para complementar los trabajos. Estos son ARBA, el Ministerio de la Producción (CIC – CEMECA), la secretaría de Minería, el SENASA, ITS Argentina, el Ministerio de Transporte y las empresas proveedoras.
En términos legales, existe cierta normativa que brinda un marco para que el Plan que la Dirección de Vialidad proyectó, pueda llevarse a cabo.
Por ejemplo, el decreto N º 1350 -modernizado en 2018- establece que “la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires faculta a la Dirección de Vialidad Provincial a aprobar los protocolos y metodología para el control de pesos y dimensiones a desarrollarse y el uso de estos instrumentos (…)”. Es decir, Vialidad tiene la potestad de seleccionar los equipos de medición en las Rutas Provinciales y su respectiva ubicación.
El laboratorio del Centro de Metrología y Calidad (CEMECA) – CIC de la Provincia de Buenos Aires es quien tiene la potestad de homologar todos los elementos metrológicos que correspondan a la Provincia. Mientras que, en paralelo, se estableció que cualquier equipo que tenga homologación en su país de origen y haya presentado ensayos de laboratorio, puede obtener la homologación primitiva por parte del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
Este dato es de vital relevancia ya que pone de relieve la magnitud de la articulación dada: la historia y experiencia de la Dirección de Vialidad de la Provincia de Buenos Aires y el prestigio del Centro de Investigaciones Científicas.
En conclusión, el Plan de control de cargas de 30 estaciones implica la instalación de las balanzas WIM de alta velocidad en los sectores relevados en los que existen altos índices de sobrecarga. Con dichas balanzas, y habiendo sido previamente homologadas, se podría efectuar la multa. Sin embargo, no se descarta que en un futuro se realicen los controles con balanzas de alta velocidad que detecten los camiones con sobrepeso y luego se corrobore la infracción a través de un segundo pesaje, con balanzas de baja velocidad.
Respecto a la rentabilidad de la implementación de este plan, los datos son contundentes: si se realiza una comparación de los montos de inversión que se van a efectuar en los cuatro años de la gestión de Axel Kicillof en materia de infraestructura vial, lo invertido en la compra de las 30 balanzas representa tan sólo un 0,7 % (8 millones de dólares) del total. Además, la utilización de estas balanzas permite preservar entre 10 y 15 años las obras que se realicen, acompañando una visión a largo plazo que permita mantener en buen estado la Red Vial de la Provincia de Buenos Aires.