La FEPAC fue creada en el año 1971 con la denominación FELAC, una federación latinoamericana que se convirtió en panamericana en el año 1993. Actualmente, congrega, en calidad de miembros plenos, a las Asociaciones Nacionales de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Portugal, España, Honduras, México, Paraguay, Perú y Venezuela.
Las Asociaciones Nacionales, a su vez, congregan a las empresas consultoras privadas de sus países, con la misión de apoyar el desarrollo de la actividad de consultoría y sus mercados. Además, organizaciones de otros sectores que tienen intereses y objetivos convergentes o complementarios, pueden ingresar a la Federación para facilitar el intercambio y la cooperación recíproca, capaces de desarrollar una sinergía importante para el fortalecimiento del mercado de la consultoría.
La FEPAC es conducida por un Comité Ejecutivo, subordinado a la Asamblea General que aprueba sus planes estratégicos y programas de trabajo a corto, mediano y largo plazo. La base administrativa está en la Secretaría General estructurada para atender a las comunicaciones y promover la realización de los programas de trabajo. A su vez, el Comité Ejecutivo mantiene una relación estrecha y constructiva con las agencias financieras multilaterales, especialmente el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con la Organización de los Estados Americanos (OEA) y otras organizaciones internacionales.
¿Cómo nace la FEPAC?
Ángel Ferrigno: FEPAC se fundó hace 45 años. En un principio como Federación Latinoamericana de Consultores (FELAC), donde sólo era Latino América. Nació con un gran empuje de gente de Brasil, Argentina, Chile y Perú. Y siempre estuvo muy activa. Lo que nació como FELAC, en algún momento se transformó en FEPAC, porque se incorporaron Estados Unidos y Canadá, que ahora ya no están. Hoy en día se incorporaron España y Portugal y en total son 14 países.
¿Por qué salieron Estados Unidos y Canadá?
A.F.: Se fueron porque las preocupaciones de ellos son absolutamente distintas a las de los países latinoamericanos. El mercado de ellos es el mundo y el nuestro, lamentablemente no lo es. Es distinta la problemática y funcionamos diferente. Además, existe la FIDIC, que es la Federación Internacional de Consultores, que agrupa países de todo el mundo. Argentina, desde la Cámara Argentina de Consultores de Ingeniería (CADECI), era socia de las dos. Después, con la crisis del 2001, dejamos FIDIC por los recursos económicos. Igualmente, tenemos buenas relaciones y hay cosas que hacemos en conjunto para potenciarnos. Ahora estamos intentando implementar un curso sobre los contratos de FIDIC, que son los que se manejan en el mundo.
¿Cómo nacieron esos contratos?
A.F.: Nacieron básicamente para cubrir los baches legislativos. Las consultoras que actuaban en todo el mundo, iban a algún país con baches legislativos y entonces implementaban los que ya tenían. Estos contratos son reconocidos por los bancos de créditos y fueron estableciendo algunas normas y criterios, particularmente sobre el rol del ingeniero en las obras.
¿Cuál es el objetivo principal de FEPAC?
A.F.: Difundir la actividad de las consultorías en cada ámbito territorial. Eso significa decir lo que hacemos porque consideramos que es un aporte para la sociedad. Entre las actividades que realizamos se encuentran decidir cuáles son las mejores prácticas, realizar manuales, definir formas de contratación y mantener relaciones con potenciales clientes. También, facilitar la relación entre las consultoras y los países para lograr convenios entre las distintas empresas.
¿Qué cambios se van a implementar a partir de su presidencia?
A.F.: En mi discurso inaugural, expuse el plan de acción en el corto plazo que queremos desarrollar y que tiene que ver con atender la globalización, buscar que las empresas de la región puedan trabajar en nuestro territorios y lograr la exportación de servicios de ingeniería y consultoría.
El trabajo que hacemos es hacia afuera, es decir, con los funcionarios, medios y potenciales clientes; pero también debe ser hacia dentro, capacitarnos y ver cómo afrontamos las distintas cosas de la mejor manera.
Serían los nuevos desafíos para lograr buenas prácticas…
A.F.: Las buenas prácticas también son hacia afuera y adentro. Cuando tenés que hacer un proyecto hay que plantearse cuál es la mejor manera de afrontarlo. Y las mejores prácticas son los distintos consensos que se van formando. No son normas ni se pueden imponer. Es crear un consenso que sea beneficioso para todos. Esas son las cuestiones a la que nos abocamos. Y lo materializamos a través de congresos, reuniones, manuales, etc.
El trabajo que realiza la consultoría es intangible, porque es un servicio de conocimiento. Cuando uno habla de proyectos y de infraestructura, la consultoría evalúa todas estas etapas previas. Después están los controles de calidad e inspecciones. Todo eso es importante.
¿Cómo es la relación con los bancos internacionales?
A.F.: El BID, el CAF y el Banco Mundial trabajaron mucho estas cuestiones. Existen procedimientos de cómo se deberían hacer las cosas. Lo que sucede es que a veces las urgencias hacen que algunos de esos pasos necesarios, sean salteados. Pero los bancos son los que más hincapié ponen para que se realicen los estudios económicos y de factibilidad. Los procedimientos existen, lo que tenemos que hacer es difundir que esos pasos son necesarios. Que es preferible demorar un poco. Los proyectos tienen que estar bien estructurados financieramente.
Si hago una ingeniería básica en una obra, mi porcentaje de aproximación está entre tal y tal valor. Pero si hago una ingeniería básica extendida, el margen de precisión se achica. Entonces, evitás que las obras terminen con adicionales o imprevistos. La única realidad es que no podés hacer una obra si no tenés el proyecto y los planos. Además, los errores que uno comete en los inicios de un proyecto, son los que más caros se pagan después. Difundir esto también es tarea de FEPAC.
¿Qué engloba hoy la Federación?
A.F.: En la actualidad estamos en el orden de las 1.000 empresas, 75 mil empleados y 7.500 millones de dólares anuales de facturación. Esos son los tres datos interesantes. Allí hay mucha diversidad entre los distintos países.
¿Cómo es la situación de Brasil puntualmente?
A.F.: Brasil está viviendo una situación complicada. Están haciendo retrocesos en las inversiones y eso repercute en las empresas consultoras. Perdieron terreno. Antes, era el dominante en Latinoamérica. Ese espacio hoy lo están ocupando los españoles. Hay algo que es clave: para poder salir a exportar, se tienen que dar una serie de cosas, pero una de ellas es que vos tenés que ser fuerte en tu país de origen. Y los españoles, con toda la modernización en infraestructura que hicieron, lograron formar empresas muy fuertes y hoy están ganando contratos importantes.
En Latinoamérica, con respecto a la infraestructura, hay mucho por hacer. En principio habría que subir del 3% del PBI al 5%. Las necesidades son muy grandes.
Las posibilidades de trabajar con el exterior, ¿se van facilitando con el tiempo?
A.F.: A eso le ponemos mucho énfasis en la FEPAC. No siempre se logra, porque ahí es donde se junta con los intereses de los actores. Generalmente es muy difícil esa internacionalización de las empresas y de los países menos poderosos. Acá en Argentina, tenemos que fortalecernos internamente si queremos salir a exportar. Cuando exportás ingeniería, muchas veces detrás de eso, vienen los equipos y los bienes. Para eso, son muy importantes los pliegos y la visión política de los funcionarios. De todos modos, FEPAC propugna la alianza.
¿Para qué sirve la consultoría?
Es imprudente invertir sin estudios confiables de viabilidad técnica, económica y ambiental, preparados por empresas de consultoría, de gestión o de ingeniería.
La gerencia de proyecto a cargo de una empresa consultora permite asegurar la calidad, el cumplimiento de plazos y el control de los costos de ejecución.
Las empresas de consultoría de cada país tienen capacidad técnica y de gerencia para atender a toda la demanda de servicios, buscando alianzas con empresas de cualquier parte del mundo cuando es necesario.
La empresa consultora es aliada y consejera de alta confiabilidad del propietario o inversionista, comprometida con la optimización de las inversiones y pleno éxito del proyecto.
En la reciente Asamblea General de la Federación Panamericana de Consultores (FEPAC), realizada en Río de Janeiro, Brasil, el pasado 28 de marzo, el Ing. Ángel Ferrigno, representante de la Cámara Argentina de Consultoras de Ingeniería (CADECI) fue nombrado Presidente, para el periodo 2016-2018. Como Vicepresidente, fue nombrado el Ing. Mauro Ribeiro Viegas Filho, representando a la Associação Brasileira de Consultores de Engenharia (ABCE).
El Ing. Ferrigno fue presidente de CADECI entre los años 2009 y 2012, teniendo una intensa actividad en el mundo de la consultoría, integrando la Comisión Directiva del Centro Argentino de Ingenieros.