*Por Jorge de Mendonça, presidente de AIMAS.
Para recuperar el cabotaje hay que migrar hacia la Economía de Transporte Intermodal.
La Asociación Intermodal de América del Sur (AIMAS) propone el intermodalismo como economía de transporte para, desde el corto plazo, comenzar a expandir la capacidad logística, reducir la huella de carbono y, a través del aumento de la renta de las empresas, maximizar inversiones en los eslabones de la cadena logística.
El transporte doméstico por agua, el cabotaje fluviomarítimo, es parte de esos eslabones que deberán crecer.
Para esa recuperación doméstica de cada marina mercante, es necesario comprender la escena del comercio y de la logística del propio continente, y qué está pasando en el mundo.
El comercio global de mercaderías manufacturadas cambió radicalmente desde que se contenerizó la cadena, y es lo mismo que necesitará el cabotaje.
A excepción de América del Norte y, recientemente, Brasil, la mayor parte de los países del mundo y casi todas las regiones económicas, no han adoptado al contenedor como pieza técnica para la facilitación del comercio doméstico y regional.
Según lo analizado por el equipo de AIMAS, existen dos factores principales por los cuales el resto del mundo no ha contenerizado fronteras adentro:
- Las compañías de logística y transporte no poseen una cultura de integración entre modos (Economía de Transporte Intermodal).
- Lo realizado en materia de contenerización se ha limitado al uso de contenedores de 40 pies o, como máximo, de 45 pies.
- No serían pocos los países en los que las normas aduaneras se aplican al comercio doméstico cuando el transporte de los bienes se realiza por vía náutica.
La falta de una cultura logística que pudiera tender hacia una integración, no habría permitido observar que ese contenedor no resulta eficiente para los movimientos del camión o hasta de vagones ferroviarios, pues las normativas del automotor y del ferrocarril suelen permitir tamaños, volúmenes y pesos superiores a los de esos dos contenedores.
No importa que el tramo ferroviario o fluviomarítimo resultara muy económico, porque el exceso de capacidad del camión ante un contenedor que no lo completa, resultará en una última milla de mayores costos en dinero y en huella de carbono.
Para que el transporte fluviomarítimo de cercanías o de regiones en común vuelva a crecer, será necesario que la cadena logística se integre en una economía de transporte intermodal y que, al mismo tiempo, adopte un contenedor que complete la capacidad del camión.
Para que se recuperen las flotas mercantes interiores de los países con sus comercios domésticos (cabotaje), las administraciones públicas locales deberán retirar antiguas normativas aduaneras que suponen riesgos de contrabando cuando un buque del país viaja con carga del mismo entre dos puertos de la propia jurisdicción.
Modelo Económico + Trazabilidad + Contenedor
Con base en el caso de Argentina, la Asociación AIMAS en conjunto con directivos de otras organizaciones de la gremial empresaria Pyme, del transporte automotor de cargas, de los profesionales de la marina mercante y también del sector profesional y académico, están desarrollando una acción y gestión en pos de la recuperación del cabotaje fluviomarítimo del país actuando sobre temáticas normativas y técnicas que también será necesario que los países de la región lo puedan resolver:
- Código aduanero: Es necesario que el Estado retire los procesos aduanales a lo que son obligadas las mercaderías del mercado interno cuando el transporte se realizará en barco (el caso de Argentina podría ser similar al de Chile y de México).
- Trazabilidad: Con la simple utilización de procesos y elementos tecnológicos, será posible que la Aduana obtenga la información sin intervenir, al tiempo que la cadena logística podrá utilizar la misma información segura.
- Semirremolque de 53 pies: La unidad de carga impacta en la viabilidad económica de la logística. AIMAS ha presentado a las autoridades de transporte de Argentina la solicitud para que se habilite el camión de 20,50 m de largo para cuando es un equipo de tractor y semirremolque (a excepción de Brasil, América del Norte y Ecuador, los demás países de la región deberán homologar la libre circulación del semirremolque de 53 pies).
La economía de los países necesita respuestas ahora. Intermodal no es una tecnología para disfrutar dentro de muchos años, sino que es una Economía de Transporte que ya mismo podemos y necesitamos implementar.
En muy corto plazo, Bahía Blanca, Posadas, Antofagasta o Natales podrán mejorar sus competitividades al sumar el transporte fluviomarítimo con que tan solo las autoridades gubernamentales coloquen en similitud de oportunidades a ese modo frente a los demás.
Las preocupaciones aduanales sobre el contralor de las mercancías, solo necesitan que se simplifiquen las normas para el comercio doméstico y que se implementen procesos simples soportados en técnicas de trazabilidad y, por supuesto, gran integración con el tren y con el camión a través del contenedor de 53 pies.
Está en manos de los gobiernos y podrá devolver éxitos en el corto plazo.