Austin Powder Argentina S.A., subsidiaria en nuestro país de Austin Powder International desde el año 1993, produce una línea completa de explosivos industriales, accesorios de voladura y realiza servicios de voladura para la industria minera; canteras, cementeras y caleras; e industria petrolera para prospección sísmica.
La empresa reconocida por sus servicios de voladura cuenta con un complejo industrial ubicado en las ciudades de Rafaela y Bella Italia, provincia de Santa Fe, donde se fabrica toda la línea de explosivos que también exporta a Uruguay, Perú, Bolivia, Sudáfrica, Ecuador, Brasil y Chile. Además, cuenta con Bases de operaciones en Tandil e Hinojo-Olavarría, provincia de Buenos Aires, Cerro Vanguardia, Mina Pirquitas y Cerro Negro que le permiten una cobertura completa del territorio argentino.
Entre los productos de la compañía se destacan: altos explosivos y agentes de voladura (Emulsión, ANFO), iniciadores (Boosters), cordón detonante, detonadores no eléctricos, cargas sísmicas y explosivos primarios (Pentrita, Hexógeno, Octógeno). Asimismo, Austin Powder ofrece a sus clientes un asesoramiento integral relacionado con aspectos técnicos y legales para el almacenamiento, transporte y uso de explosivos; sobre la comercialización y distribución de explosivos y accesorios de voladura y el servicio de voladura que cumplimenta los mejores estándares de seguridad internacionales.
En este número especial sobre Minería, Revista Vial conversó con el Sr. José Mario Albarello, gerente de las Bases de Operaciones Tandil e Hinojo-Olavarría de la empresa Austin Powder Argentina para conocer por dentro el servicio de voladura y sus derivados que la compañía brinda y que hacen posible el desarrollo y crecimiento de las canteras de nuestro país.
SOBRE EMULSIONES Y DETONADORES
¿En qué consisten las voladuras con emulsiones a granel?
José Mario Albarello: Los explosivos tradicionales son encartuchados. Con el tiempo, la industria buscó hacer explosivos más baratos y seguros. Fue así que se crearon las emulsiones que son productos que se elaboran o se hacen reaccionar dentro de una planta móvil que va en el camión fábrica. Ésta, con el correr de los años, también fue evolucionando. Nosotros tenemos la última generación de emulsiones gasificadas compuesta por componentes no explosivos que al mezclarse y hacerlos reaccionar en la cantera, recién allí pasan a ser un agente de voladura. Éste es un producto que no explota en sí mismo sino que puede explotar únicamente por otra explosión. Por esta razón, estos productos son de muy alta seguridad de uso. Gracias a eso se pueden procesar en una máquina y bombearlos. En el caso de las grandes minas, si no contáramos con este sistema sería imposible hacer voladuras tan grandes. Esto lo pudimos trasladar a todo el mercado y fuimos pioneros. Como este producto es muy específico, no se lo podemos vender a alguien, sino que hacemos el servicio, la voladura. Nos encargamos de todo lo referido a explosivos, todo el proceso con detonadores no eléctricos ó electrónicos, excepto las perforaciones que están a cargo de nuestros clientes.
¿Cómo funciona un detonador?
J.M.A.: El detonador no eléctrico viene con un tubo por el cual se le manda una pequeña trasmisión de una detonación. No es por un impulso eléctrico. La gran cantidad que se usan son así. Después, desde hace unos años, lo que hemos implementado son los detonadores electrónicos. Cada uno de estos tiene un chip. Nuestro sistema de iniciación electrónica E*Star es de muy alta seguridad, requiere equipos complejos computados para su detonación, no es posible detonaciones fortuitas o ante una falla. Además, programamos los tiempos de la voladura. Es así como analizamos todos los parámetros y programamos los tiempos que necesitamos. De esta manera, tenemos la seguridad y el control de cada detonador y vigilamos que esté todo como corresponde, obteniendo excelentes resultados.
¿Cuál es la diferencia entre el detonador no eléctrico y detonador electrónico?
J.M.A.: Los detonadores electrónicos, tienen la facilidad de programar los tiempos de la voladura. En cambio, los detonadores no eléctricos tienen un tiempo de retardo predeterminado de fábrica. En este sentido, con el detonador electrónico, se hace un diagrama de tiro con el retardo determinado de acuerdo a las necesidades pudiendo colocar a cada uno un tiempo de retardo diferente. Otra ventaja es que no tienen dispersión, es decir que el tiempo de retardo es exacto. Con ellos podemos hacer el cálculo de la voladura con mayor precisión y con una amplia cantidad de tiempos de retardo.
¿Cuáles son las ventajas de los detonadores que utiliza Austin Powder?
J.M.A.: Nuestros detonadores poseen un buen manejo, mayor duración y permiten que el rendimiento de la voladura mejore notablemente. Junto con el desarrollo de las emulsiones a granel, nos permite ofrecer un servicio más rápido, un mejor costo, altos rendimientos y mayor seguridad. De esta manera la evolución es constante.
¿Ustedes fabrican sus propios explosivos?
J.M.A.: Nuestro complejo industrial está en Rafaela/Bella Italia, provincia de Santa Fe. La empresa invierte muchísimo para mejorar constantemente la calidad y cantidad de productos necesarios fabricados en Argentina para la actividad. Inauguramos hace tres meses en Bella Italia una planta de emulsiones encartuchadas y a granel, una de las más modernas del mundo por su alta tecnología y automatización del proceso productivo. Tenemos una planta de fabricación de cordón detonante y otra de detonadores no eléctricos que es una planta muy compleja de ensamble, los elementos los traemos de una fábrica de Austin Powder Internacional de República Checa. Además, plantas de Pentrita, Hexógeno y Octógeno que son explosivos primarios que se usan, por ejemplo, para hacer detonadores, la Pentrita para el cordón detonante y el Hexógeno tiene otros usos.
Es decir que producimos en Argentina todos los productos que son necesarios para la voladura, emulsiones a granel y encartuchadas, explosivos, ANFOS, Boosters y detonadores.
¿Cómo funciona el cordón detonante?
J.M.A.: El cordón detonante se utiliza para iniciación por medio de una transmisión de una detonación. Tiene un alma de explosivo. Si lo comparamos con un cable eléctrico, en vez de tener la parte de adentro de cobre, tiene una mínima cantidad de explosivo que se transmite a una velocidad rápida. La velocidad es de 7 mil metros por segundo. Es decir, realiza una transmisión instantánea. El cordón detonante que tiene muchos usos, es como para un electricista un cable.
SERVICIO DE VOLADURA POR DENTRO
¿Se precisan conocimientos específicos para realizar una voladura?
J.M.A.: Toda la voladura es una ciencia y un trabajo específico. Uno debe analizar todas las variables: el tipo de yacimiento, de roca y las condiciones de la explotación. Debemos evaluar cómo se quiere explotar y qué tipo de maquinaria se tiene para hacer ese tipo de explotación. Hay que considerar que el primer paso para la extracción de la roca es la voladura, dependiendo de su resultado es la eficiencia obtenida en la carga, transporte y trituración. Se trata de todo un proceso que va en cadena en el cual hay que elegir la maquinaria de acuerdo a la producción que tenemos. Por ejemplo, para instalar una trituradora, hay que estudiar todas las variables de producción, cantidad y de la roca que se va a triturar.
¿Cuál es el procedimiento para realizar la voladura?
J.M.A.: Junto con el canterista hacemos el diseño de la perforación, que es una parte importantísima de la voladura. Luego se determina la carga con el tipo de explosivo a utilizar, se diseña el diagrama de tiro considerando las necesidades del cliente y las vibraciones. Por último, el disparo. Todas esas partes son fundamentales y si la perforación está mal y no da los parámetros necesarios podemos tener problemas. Nosotros trabajamos con los rendimientos y los costos. Nuestro trabajo muchas veces no se conoce del todo, es continuamente estar con el canterista. Contamos con la experiencia necesaria, hacemos varias voladuras diarias y trabajamos constantemente con la seguridad. Nuestro slogan es: la seguridad es nuestra primera prioridad.
¿Pueden saber antes qué tipo de roca se va a desprender?
J.M.A.: Sí, es parte de nuestro trabajo analizar el tipo de piedra y evaluar las variables que conlleva. Una de estas es la capacidad de su maquinaria para triturar y moler, y otra es el tipo de material que la cantera busca obtener. Muchas veces las canteras no necesitan fino, o por ejemplo, si es para ruta el fino si es un tipo de material fundamental. Entonces, lo que hacemos es tratar de obtener la granulometría que necesita el cliente. Por ejemplo, acá en Olavarría, por el tipo de granito que hay de acuerdo al mercado, a veces abundan los finos. Todo refiere a la técnica sobre el tipo de explosivo y sobre todo de la iniciación.
EL MERCADO ARGENTINO DE AUSTIN POWDER
¿Cuáles son las empresas que suelen contratar sus servicios?
J.M.A.: La mayoría de las empresas que atendemos desde nuestras bases son de la zona de Olavarría y Provincia de Bs.As. Las cementeras también están utilizando este sistema en dos tipos de implementaciones. Por un lado, tienen la explotación de la producción, y por el otro, la explotación en yacimientos para sacar el estéril.
¿Cómo cubren todo el territorio de nuestro país?
J.M.A.: Desde nuestro complejo industrial de Rafaela/Bella Italia donde se fabrican todos nuestros productos se envían y distribuyen a todo el país, bases de operaciones, minas, centros de distribución con polvorines propios, clientes y exportación.
¿Cuánto consume el mercado de Austin Powder en la Argentina?
J.M.A.: Tenemos una alta participación en el mercado argentino con una amplia línea de explosivos y accesorios producidos en el país.
