Entrevista a Eric Wentinck, CEO y Cofounder de Fiberkuvet S.A., una empresa dedicada a brindar soluciones sustentables e innovadoras a través de la fabricación de columnas PRFV.
– ¿Cómo fueron los inicios de la empresa?
Eric Wentinck: Soy ingeniero industrial y siempre fue muy inquieto. Tuve la suerte de nacer en una familia donde la industria siempre fue y sigue siendo parte de nuestra vida, mi padre es un emprendedor, y fundó hace 50 años una fábrica de cables que estaba ubicada a una cuadra de mi casa. Así que viví los altibajos de la Argentina desde una Pyme muy chiquita y a pulmón. Con mis hermanos íbamos siempre en vacaciones a ayudar en la fábrica, para realizar control de calidad, acompañar al chofer o hacer las entregas. Luego de adolescente y mientras estudiaba en la universidad, hacía los repartos con una camioneta, Esto me permitió estar en contacto con la gente desde chico. A mis 25 años comencé a buscar trabajo en otras empresas. Así, me desempeñé en distintas multinacionales, tuve la experiencia de poder ir escalando, y llegar a ocupar cargos de liderazgo cómo jefaturas y gerencias de área. Fue de los más variado todo, procesos alimenticios, otros petroquímicos, hasta que empecé a tener la necesidad de hacer algo diferente, de emprender algo. Empecé a vincular todo lo que había aprendido de la Pyme familiar y la forma de trabajar de las multinacionales. Trabajar con normas y procedimientos escritos, objetivos con indicadores de gestión y de negocios. En las pequeñas industrias no es normal contar con este tipo de gestión que luego de mucho esfuerzo y decisión se logra.
En este punto sentía la necesidad de hacer un camino diferente, nuevos desafíos y al mismo tiempo buscando algo que tenga un impacto positivo para la sociedad. Entonces, encontré las columnas de fibra de vidrio como un producto que me sorprendió, sobre todo por sus características dieléctricas que eliminan los riesgos de electrocución de las personas, porque duran 80 años y, además, en su composición tienen un 30% de reciclado de botellas de PET, colaborando con el medioambiente y la sociedad a través de la economía circular. Me tentó todos estos beneficios, la innovación que representaban y el gran desafío de afrontarlo.
– ¿En qué año comenzó con este proyecto?
Eric Wentinck: Inicié a armar el proyecto en el año 2015. Durante todo el 2016 estuve trabajando en el mismo con socios potenciales que no proesperó. Luego, en el 2017 armé bien el plan de negocios y armamos la sociedad con un socio inversor, comenzando desde cero asumiendo una deuda importante. Un salto al vacío que afortunadamente conté con el apoyo de mi mujer y mis hijos que me acompañaron en todo este proceso evolutivo. A pesar de tener mi propio negocio, hoy sigo siendo parte de la empresa familiar. Soy socio y estoy en el Directorio, y con mis tres hermanos nos va muy bien. Mi padre ya se ha retirado del día a día de la empresa, pero continúa con otros proyectos, porque es un emprendedor de toda la vida.
– Y respecto al material que utilizan en la fabricación de las columnas, ¿En qué consiste?
Eric Wentinck: Utilizamosresina poliéster. Los proveedores son de Argentina y en su composición contiene un 30% proveniente del reciclado de botellas PET. Es decir, ya es parte del proceso de resina virgen, no es que uno pueda elegir una resina virgen al 100%. Ya el mercado migró a ese 30% porque es de la misma calidad que la resina virgen. Entonces, es muy interesante todo, porque la base del producto ya parte de la economía circular y de primera calidad. De alguna manera, se comienza a romper con ese paradigma de que lo reciclado no es de buena calidad.
– ¿Además cuentan con certificaciones que los avalan no?
Eric Wentinck: Exactamente, contamos con el sello de IRAM. Somos pioneros en certificar esta norma que salió en el año 2020, por otro lado, para hacer una referencia con el material, el poliéster que utilizamos es el mismo que se usa en las embarcaciones. Es decir, está totalmente probada su efectividad, duración y flexibilidad. Para nosotros la calidad de producto y de servicios es indiscutible.
– ¿Y cuál es el mercado que abarcan?
Eric Wentinck: Abarcamos diferentes mercados, el de iluminación pública, iluminación privada, tendido de redes de telecomunicaciones, tendido de redes de energía de baja tensión.
– ¿Y en qué consiste la tecnología que utilizan?
Eric Wentinck: Utilizamos la tecnología llamada Filament Winding que consiste en una matriz con la forma interior de la pieza a fabricar, esta matriz gira sobre su eje, se va cubriendo con los hilos de vidrio (Multifilamentos de vidrio) previamente pasan por un baño de resina poliéster con todos los aditivos que le darán propiedades mecánicas, ignífugas, filtro UV, acelerantes y catalizadores de la reacción química para solidificar, etc..
La cantidad de hilos, capas y su disposición son clave para determinar la resistencia que necesita cada modelo, ya que en función al uso que se le dará a la columna se determina su resistencia en la cima y se calcula de acuerdo a norma.
Ese es un tema que tiene que ver con mi historia previa, ya que entendemos el servicio al cliente cómo una prioridad; porque estuve en ese lugar donde muchas veces no había tiempo y se necesitaban mejoras de procesos, optimización de los recursos y hacer proyectos que mejoren la rentabilidad. Entonces, con nuestro conocimiento, los ayudamos y adaptamos el producto a su necesidad.
– ¿Cuáles son sus potenciales clientes?
Eric Wentinck: Comenzamos con telecomunicaciones y hoy abarcamos también iluminación. Tenemos a grandes empresas de telecomunicaciones, empresas distribuidoras de energía, municipios e instaladores de alumbrado público
En cuanto a iluminación en centros urbanos, estamos presentes en la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Corrientes, Santa Fe, Mendoza, Neuquén, Río Negro. Aun así, es mucha la gente que todavía no nos conoce. Diariamente recibimos llamados de personas nuevas que no tenían conocimiento sobre nuestro trabajo. Nos toca mucho esfuerzo de docencia y generalmente se sorprenden con las instalaciones que realizamos y los beneficios asociados a esta tecnología.
– ¿Y cómo es emprender en la Argentina?
Eric Wentinck: Es complicado. No podemos evitar los vaivenes del país. No pensé que iba a ser tan desafiante. Nacimos en el 2017 y nuestra primera producción fue en el 2018, con muy poca venta. Luego, en el 2019 comenzamos a reactivar muy lentamente, pero vino el cambio de gobierno y no se vendía nada. Esperamos el nuevo plan económico y llegó la pandemia. Habíamos realizado una gran inversión, sin recuperar nada. Saliendo de la pandemia, estuvimos a punto de cerrar. Pero empezamos a tener ventas muy lentamente, luego seguimos bien y ahora estamos creciendo poco a poco. El país tiene mucha necesidad de inversión en infraestructura. Este año es de supervivencia, estamos con más trabajo, pero no el suficiente para ocupar a todo el personal, de todas maneras no hemos reducido, los mantenemos primero por una responsabilidad social y segundo porque es muy difícil preparar nuevamente personal nuevo. Seguimos adelante, apostando por nuestra empresa, nuestra gente y mejorando día a día para ofrecer mejores productos y servicio con mejor costo.