El vicepresidente de la Asociación Brasileña de Tecnología para la Construcción y Minería (Sobratema), Eurimilson João Daniel, dentro del marco de la presentación de Construction Expo 2013 realizada en San Pablo, brindó un panorama de la economía brasileña y la importancia de la cadena constructiva para la generación de empleo y el crecimiento de la industria.
EL DESAFÍO DE CRECER
Brasil enfrenta una nueva realidad, con un mundo más dinámico y más desafiante. La lucha de hoy es centrarnos en la senda del crecimiento. Los números muestran el desarrollo y cómo la cadena de la construcción está trabajando muy bien y haciendo sus tareas.
Un reflejo de ello es el considerable aumento en el total de personas empleadas por la industria, que desde el 2007 al 2012 fueron para las máquinas de línea amarilla 131.162 personas y para todo el sector 370.000. Asimismo, la recaudación de impuestos de la cadena constructiva pasó de 16.250 millones de dólares en 2007, a más de 35.000 millones en 2012.
La cadena de construcción tiene tres indicadores muy importantes:
• La ocupación de mano de obra: En todos los lugares del país la construcción significa desarrollo. En 2005 eran 2.900 los municipios con empresas de la cadena que generan puestos de trabajo; hoy son cerca de 4.000 los municipios que tienen compañías vinculadas a la cadena constructiva generando empleos. Actualmente estamos cerca del 8% del Producto Bruto Interno (PBI) y casi el 15% de la mano de obra productiva.
• La recaudación tributaria: Generamos riqueza, por eso tenemos que encontrar el camino para lograr un eficiente sistema tributario.
• Cifras de la industria de maquinaria para construcción: Se duplicó el tamaño del parque industria y la demanda de máquinas. Eso significa que somos capaces de mejorar la productividad.
INVERSIONES
Algunos datos de la economía global muestran que en términos de competitividad, del total de 144 países Brasil está en la posición 48. En la evaluación del Mercosur (con notas del 1 al 7), el país tiene una nota de 2.9, a nivel mundial la media es 4 y del Mercosur el promedio es 3.4. Estamos detrás de países como Chile (5.9), Uruguay (4.4), Ecuador (3.5), Argentina (3.3), Perú (3.3) y Venezuela (3.2).
En cuanto a las tasas de impuestos, de los 144 países estamos en la posición 131. De continuar así vamos a quedar en último lugar. Por lo tanto, es necesario una urgente reforma tributaria.
Sin duda el desafío del crecimiento y desarrollo pasa por las inversiones alineadas con la política económica; y la infraestructura es la base. Anualmente se invierte el 18% del PBI para nuevas obras, pero nuestra meta es llegar al 25%. China, por ejemplo, destina un 48% ; India un 34%; Chile, Perú y Colombia un 25%; y Rusia cerca del 20%.
Uno de los principales destinos de las inversiones son para las rutas, pero igualmente es escaso ya que sólo el 34% de la red pública de carreteras presenta condiciones buenas o excelentes.
La red vial brasileña tiene 1.6 millones de kilómetros, de los cuales el 13% está pavimentado, es decir 190.000 km (un 8% está privatizado). De este total, 53.000 necesitan mantenimiento.
En 2011 y 2012 se invirtieron cerca de 7.000 millones de dólares, cifra que debería duplicarse. El mal estado de las vías y el alto costo de la logística hace que se deba ampliar hacia otros modos de transporte y reducir la dependencia en la carretera.
Por ejemplo, los costos adicionales de la logística representa cerca de 9.000 millones de dólares para la industria, casi el 2% de los precios de los productos. El Banco Mundial señaló que en Brasil el costo de la logística llega a representar hasta el 26% del precio toral del producto.
CONCRETAR LOS PROYECTOS
Tenemos que tomar el papel de nuestro futuro, del desarrollo y buscar la solución para mejorar la productividad.
En 2012 Sobratema realizó una investigación con las inversiones previstas hasta el año 2017. La Tabla 1 muestra los datos más relevantes.
Curiosamente, las 100 principales obras que se llevan a cabo en el país representan el 64% de las inversiones. Si analizamos por sectores podemos señalar:
• Petróleo y gas: El papel principal es de Petrobras, todavía es una empresa con grado de inversión aprobado y tiene un excelente mercado, por lo que tenemos que encontrar el camino y sabemos que no puede ser político.
• Transporte: Es considerado todo el sistema modal (puerto, hidrovía, ferrocarril, vías urbanas, metros, aeropuertos, carreteras y otros). Del total de 200.000 millones de dólares de inversión para el transporte hasta el año 2017, el 18% será destinado al sistema vial.
• Energía: Según el balance energético nacional elaborado por la Empresa de Pesquisa Energética (EPE), la oferta de energía creció sólo un 1,3%, en cambio la demanda aumentó un 3,6%.
• Industria: Incluso, en un escenario estable de la industria, existe aún confianza en el mercado brasileño.
• Saneamiento: Se ejecutarán más de 6.000 obras de saneamiento que beneficiarán principalmente a la sociedad.
CONCLUSIONES
Las inversiones en infraestructura en Brasil representan apenas el 2% del PBI. En Colombia y Chile, por ejemplo, la tasa es de 5,8% y 6,2%, respectivamente. Para mantener la competitividad y ayudar a resolver varios cuellos de botella que impiden un mayor crecimiento de la economía, Brasil tendría que elevar este porcentaje al menos el 4% en los próximos años.
Estas inversiones, anunciadas, principalmente, en el nivel gubernamental, son una iniciativa importante para reducir el déficit existente y representan una oportunidad para mejorar algún aspecto de la competitividad brasileña.
Además, las empresas de la cadena de construcción del país realizan inversiones constantes para mejorar sus procesos y sus productos y cuenta con tecnología, know how, experiencia, conocimiento y competencia para cumplir con las obras necesarias para aprovechar la infraestructura en Brasil.
Otro punto importante es que hay un ambiente favorable para fomentar este proceso, ya que contamos con un sistema financiero sólido, una recaudación mayor de los impuestos, una política de consumo y de inversión, una democracia consolidada y un nivel alto de empleo basado.
En el ámbito internacional, hay un fortalecimiento de toda la región de América del Sur, con un fuerte crecimiento económico en varios países.