“La política de seguridad vial no tiene que tener fines recaudatorios no persecutorios”

Desde finales del año 2013, el Dr. Claudio Saúl ocupa el cargo de ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Derechos Humanos en la provincia de La Rioja. Desde allí lleva adelante la aplicación de políticas concretas para la prevención de accidentes viales y la disminución de víctimas fatales.

¿Cuándo se creó la Agencia Provincial de Seguridad Vial?

Claudio Saúl: La Agencia se puso en funcionamiento el 20 de marzo del año 2014, por decisión del gobernador en ese entonces. Era una necesidad de política de Estado, ya que una de las causas principales de muerte en todo el territorio nacional era el tema de la siniestralidad y la accidentalidad vial. En La Rioja, había una ausencia de políticas públicas para garantizar algo tan esencial en el ser humano como es el derecho a la vida. Entonces, nos animamos a tomar decisiones fuertes con convicción, coraje y fundamentalmente, alejados de las políticas clientelares.

¿Y cuáles son los objetivos fundamentales?

C.S: Tuvimos en cuenta los ejes principales que tiene la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV): disminuir la siniestralidad vial y la pérdida de vidas humanas en las rutas. Coincidimos con la Nación para poder articular políticas y objetivos comunes, como la Licencia Única de Conducir. Creo que era algo esencial para otorgarle a un conductor con mucha responsabilidad y exigencia, con exámenes médicos, pero fundamentalmente con los antecedentes que pudieran tener.

¿Cuál era la situación anterior con respecto a esto?

C.S: En cualquier territorio del país una persona podía obtener la licencia. Eso sigue pasando en aquellos municipios que en su potestad y en su competencia de jurisdicción tienen autoridad pero no autonomía. Pero los que estamos adheridos, contamos con los antecedentes y las contravenciones registradas. En La Rioja, los 18 municipios se adhirieron mediante acta y hay nueve que ya tienen el sistema de otorgamiento de licencias de conducir de la Nación. Esos nueve departamentos significan el 80% de la población de la provincia.

¿Qué rol cumplen los datos estadísticos en el trabajo de la Agencia?

C.S: El Observatorio Vial es muy necesario para determinar las estadísticas y así conocer cuáles son las causales fundamentalmente de los incidentes. Si no se tiene un nivel estadístico importante, no se puede trabajar sobre políticas de intervenciones urbanas como semaforizaciones, cordones, ampliación de veredas, reductores de velocidad y rotondas. Como ejemplo puedo mencionar un trabajo estadístico que realizamos y donde determinamos que en la Ciudad Capital hay cinco avenidas principales que concentran el 75% de la siniestralidad vial. Entonces allí es donde debemos aplicar una política de seguridad.

POLÍTICAS DE ESTADO

¿Qué medidas empezaron a tomar para trabajar la problemática?

C.S: La decisión política es la clave para que todos estén amparados por la ley en igualdad de condiciones, sin privilegios. En La Rioja disminuimos notablemente la pérdida de vidas humanas y los accidentes de tránsito en base a una decisión que tomó primeramente el gobernador, Luis Beder Herrera en junio del año 2015. Allí se estableció como norma contravencional que aquel que conduzca con determinada graduación de alcohol en sangre tenga tres sanciones: la multa, el secuestro del vehículo y la detención automática de la persona. La prisión va de 0 a 30 días de acuerdo a la graduación alcohólica que tenga y las multas económicas van de los 4 mil pesos hasta los 12 mil pesos. El éxito de esta norma fue tal que la causal de incidentes de tránsito hoy, ya no es el alcohol sino que a nivel estadístico son: el flujo vehicular en avenidas y carreteras que no tienen colectoras, falta de iluminación, baches y la ausencia de educación vial. El éxito de la medida fue que no hubo privilegiados, sino para todos igual. Tuvimos muchas presiones para dejarla sin efectos.

¿Qué otras políticas llevan a cabo?

C.S: Un eje importante es la responsabilidad empresarial. Comprometer a los propietarios y organizadores de eventos y/o fiestas para que se desarrollen con normalidad. Esto lo logramos con la política del “Conductor Designado”. Allí el empresario garantiza la entrada gratuita del mismo, le otorga un espacio adecuado y una pulsera para que no se le venda alcohol. Esa es la persona encargada de trasladar a los chicos después de un evento.
Otro tema fundamental es la capacitación para la fuerza de seguridad y los inspectores. Debemos brindales conocimientos profesionalizados con las leyes nacionales, provinciales y municipales y darles a conocer cuáles son los ejes estratégicos para poder ser gestor y transmisor de las ideas que tiene un Estado. Siempre decimos que la política de seguridad vial no tiene que tener fines recaudatorios ni persecutorios. Sino que el objetivo específico es evitar la siniestralidad y la pérdida de vidas humanas.

¿Y con respecto a los ciclomotores?

C.S: Hay un control sobre el uso del casco y a raíz de esos operativos, tenemos otra intervención como la documentación de los papeles y la disminución de los delitos por arrebatos. En la actualidad hay más de 600 motos detenidas por alcoholemia, no uso del casco y falta de documentación. Es decir que ese control tiene otras consecuencias. A partir de una política seria y responsable, no solamente se puede atacar un problema, sino otras cuestiones conexas.
Por otro lado, el servicio de transporte urbano no es de los mejores y el ciudadano no tiene previsibilidad del horario y frecuencia. Esto hace que aquellos que se tienen que trasladar a las fábricas y escuelas, tengan que recurrir al ciclomotor. Por eso, estoy convencido que si se brinda un excelente servicio de transporte urbano, los ciclomotores van a dejar de andar y vamos a tener una disminución de accidentes. Hoy el 37% de ellos se produce por caídas de motos.

Y con la aplicación de esas medidas, ¿lograron disminuir las estadísticas?

C.S: Desde que estoy trabajando en la agencia, venimos tomando estadísticas en los hospitales, servicios de emergencia, policía, la agencia de seguridad vial y los medios periodísticos. Y se determinó que si en el plazo de los 30 días de un accidente fallece la persona, es considerada víctima de la siniestralidad vial. Puedo tomar un mes como ejemplo. En enero del año 2014, en La Rioja se produjeron 140 accidentes viales. En el 2015, 125 y en el 2016, 114. Lo cual disminuimos notablemente. Y esto está dividido en lesiones leves, graves y defunciones. En el 2014 hubo 11 víctimas fatales, en el 2015 9 y en el 2016, 6. Por otro lado, antes un cirujano, especialista en reconstrucción de cuellos y rostros, llegaba a hacer hasta 14 operaciones en una semana. Hoy hace de una a tres. Las terapias intensivas y los respiradores artificiales en los hospitales disminuyeron. Los arrebatos son controlados y logramos atemperar el impacto que de los delitos y la escala de violencia que hay.

Actualmente, ¿en qué problemática están trabajando?

C.S: Ahora estamos involucrados con el tema de los animales sueltos en las rutas. La idea es intervenir con una policía caminera que verifique las luces, cinturones, revisación técnica vehicular y además, controle los animales sueltos.

¿Qué opinión reciben de la sociedad?

C.S: Estoy convencido que las normativas son apoyadas por la mayoría de la sociedad. Y muchas provincias de la Argentina vinieron a observar los operativos para imitarlos, aunque pocos se animan a tomar la decisión de la detención.

Entonces la idea es continuar con esas medidas.

C.S: Tenemos el deber de proteger la vida de los terceros, de los que quieren vivir con tranquilidad. Entonces esto fue una decisión muy importante y la vamos a seguir trabajando para disminuir los accidentes. Continuaremos con el observatorio vial, para conocer las causas, lugares y sobre las intervenciones que tenemos que hacer hacia adelante.