Diálogo con Martín Alejandro Gutiérrez, administrador de la Dirección de Vialidad de Córdoba.
-¿Cuál es la situación actual de los caminos rurales en Córdoba?
Martín Alejandro Gutiérrez: Nosotros tenemos un sistema que fue pionero en Argentina y hoy está replicado por alguna otra provincia, pero en forma muy incipiente, en donde nuestra red de caminos secundarios y terciarios avanza en 58 mil kilómetros. Para el mantenimiento y mejoramiento de estos 58 mil kilómetros de red, contamos con 288 consorcios camineros que se reparten todos estos kilómetros y están agrupados en diferentes regionales. En total son 19 regionales que agrupan estos 288 consorcios y donde aproximadamente 3 mil productores agropecuarios trabajan ad honorem para su mantenimiento. A su vez, se emplea de forma rentada 800 empleados que son los que manejan las maquinarias. Pero la administración de los consorcios son producto de agropecuarios que lo hacen ad honorem. Este sistema en Córdoba ya lleva más de 60 años de ejecución, donde nos ha brindado muchos éxitos y es un sistema único en Argentina. De esta manera, evitamos que sea el Estado provincial con socios que realice el mantenimiento, sino que son los propios vecinos a través de este sistema de consorcios camineros los que se abocan al mantenimiento de la red de su zona, con lo cual los principales interesados y beneficiarios en el mantenimiento de la red son los que se encargan de realizarla. Esto hace que tengan un nivel de compromiso muy importante y una vinculación inmediata entre el destinatario de la obra y aquel que la ejecuta.
Por otro lado, contamos con un financiamiento que es a través del impuesto inmobiliario rural, que también es una situación inédita en el país. El 70% del monto del impuesto inmobiliario rural a partir del año 2019 fue destinado a un foro específico que se administra por la propia Mesa de Enlace, es decir los productores agropecuarios administran sus fondos. Esto generó un fideicomiso que está integrado por actores del sector público y del sector privado, a través de esa Mesa de Enlace, y de esta manera los fondos han quedado blindados. Es decir, aún en los momentos más difíciles de la pandemia, donde habíamos desdoblado el pago de salarios de la administración pública provincial, los únicos que cobraron absolutamente al día eran los consorcios camineros, precisamente porque sus recursos vienen de este fideicomiso donde no hay posibilidades de utilizarse esos fondos para otra cosa. Se llama Fideicomiso para el Desarrollo Agropecuario y van de forma automática a medida que se van recaudando los recursos del inmobiliario rural. Con este fondo se paga lo que son los consorcios camineros, que para este año estamos hablando de un presupuesto de aproximadamente 5 mil millones de pesos.
Además, van para los consorcios canaleros que también están conformados por productores, a los consorcios de conservadores de suelo que se dedican a hacer obras de mitigación de erosión o de nivel y eso depende del Ministerio de Agricultura. La parte de consorcios canaleros depende de Servicios Públicos y la parte de consorcios camineros depende de Vialidad que dirige Obras Públicas. Además de esto, por ese mismo fideicomiso se creó una nueva figura, que es el Consorcio Caminero Único, que es un único consorcio para todo el ámbito geográfico de la provincia que se encarga de las obras de pavimentación. A través de nuevas figuras, que se pusieron en marcha en 2019, llevamos pavimentados más de 200 kilómetros de caminos de la red secundaria y terciaria de Córdoba y estamos ejecutando más de 20 obras en este momento. Esperamos al final de la gestión completar no menos de 400 kilómetros de pavimento de nuevas rutas con una modalidad que también es única en Argentina, y quiero insistir en esto, donde instalamos también un sistema de contribución público privada; ya que las obras de Consorcios Camineros Únicos se hacen por contribución por mejora. Son absolutamente voluntarias, ya que para ejecutar una obra de pavimentación previamente a la licitación de la misma tenemos que contar con la mitad más uno de la conformidad de aquellos afectados de la zona de influencia, de la zona del camino, que está establecido en la propia ley de creación de este consorcio. Una vez que tenemos la voluntad firme de los productores de la mitad más uno de ejecutar la obra, de la licitación de la misma, la obra se ejecuta. Y una vez que la obra está terminada, recién en esa instancia, los beneficiarios de la misma devuelven una porción del costo de la obra que varía entre el 50% y el 75%. Según la obra, el Estado se hace cargo de entre el 50% y el 75% del valor de la misma a través del fideicomiso, y el otro porcentaje que puede ir del 25% al 50% lo devuelven los productores agropecuarios en 5 pagos anuales consecutivos a cosecha y siempre el primer pago se hace con la obra terminada, de modo que esto nos exime de cualquier tipo de promesa incumplida. Acá si no está la obra terminada legalmente no tenemos la potestad de cobrar la primera cuota.
-De esta forma se garantizan la confianza…
Martín Alejandro Gutiérrez: Exacto, el productor agropecuario sabe que hasta que la obra no esté ejecutada no se le puede empezar a cobrar. Esto ha creado un círculo virtuoso en nuestra provincia, donde tenemos largamente más de 150 solicitudes de diferentes puntos del territorio para ejecutar obras del Consorcio Caminero Único, obras de contribución por mejora, y claramente no contamos ni con la capacidad de recursos humanos ni económicos para ejecutar todas, pero sí estamos priorizando algunas. Somos muy optimistas de que al final de la gestión vamos a tener más de 400 kilómetros de nuevas rutas pavimentadas en Córdoba con este sistema novedoso. Tiene también una particularidad, que este Consorcio Caminero Único se conforma con tres actores, un presidente y dos vocales, y el presidente pertenece a la Mesa de Enlace de Entidades Agropecuarias, un vocal de Vialidad y un vocal por el Ministerio de Agricultura, de modo que el manejo de recursos que provienen de los productores agropecuarios lo organizan también productores agropecuarios. Eso habla de la confianza y de la forma de trabajo mancomunada entre el sector privado, el sector público y el sector productivo fundamentalmente de nuestra provincia, al punto que el manejo de los recursos y el llamado a licitación de las obras, el pago de la certificación de las mismas, lo realiza el Consorcio Caminero Único que está presidido por un privado.
-¿Los recursos son actualizados? Por el tema de la inflación ¿El fideicomiso tiene alguna forma de cobrar con la entrega con actualización?
Martín Alejandro Gutiérrez: Sí, está previsto. Por un punto, como el fideicomiso financia la totalidad de la construcción de la obra, ya que los productores comienzan a pagar con la obra terminada, está dentro del marco de generación, y mientras haya recursos en el mismo estos recursos pueden ser aplicados a inversiones financieras que generalmente son el Fondo Común de Inversión del Banco de Córdoba. Para tratar de que no haya una pérdida del poder adquisitivo del dinero en el tiempo dada la inflación con la cual tenés que convivir en el país. Además de esto, está previsto que las cuotas, se actualice por el índice del costo de la construcción de año a año. De esta manera, generamos un fondo rotatorio ya que los recursos que van devolviendo los productores por el pago de las obras que son beneficiarios por ley tienen que volver a fideicomiso, no se pueden utilizar para otra finalidad. De esta forma, logramos retroalimentar no solo con el cobro de los impuestos inmobiliarios del año en curso sino con la devolución de los productores beneficiarios, para poder ir ampliando el fondo y contar con más recursos disponibles para hacer más kilómetros de ruta.
-El tema hídrico que es un problema, ¿tienen asesoramiento para mantener a los canaleros?
Martín Alejandro Gutiérrez: Ocurre que los canaleros, los camineros y los de conservación de suelos si bien son consorcios diferentes generalmente los actores son los mismos. Son los mismos agropecuarios los que integran muchas veces las comisiones directivas del consorcio caminero y el consorcio canalero o son vocales o trabajan o tienen algún cargo en el consorcio de conservación de suelo. Teniendo en cuenta que el territorio es uno, de forma pionera hemos decidido conformar en la Provincia de Córdoba consorcios integrados públicos de gestión por cuenta hidrológica, porque también teníamos el problema de las divisiones netamente geográficas tanto de consorcios camineros como canaleros que no responden a la realidad del territorio. En esto hay un trabajo de muchos años en conjunto y una fortaleza institucional muy grande por parte del gobierno provincial y entendimos que el problema tiene que tener un abordaje integral porque sino ocurría en algunos momentos que en definitiva había canales que querían sacar el agua de adentro de los campos y la forma más fácil era tirarla a los caminos o aquel que quería hacer una obra de un camino levantaba un muro para proteger el camino y lo tiraba al campo. Requería un abordaje integral, por eso se han conformado y se están conformando consorcios integrados de cuenca donde los límites no son solo límites políticos sino los límites que establece la división hidrológica de la cuenta. De esta forma logramos optimizar el uso de los recursos. En un mediano plazo, la idea es fusionar los consorcios. Lo más razonable es que la gestión de estos recursos se integre y de esta manera, pasar de la sinergia a tener una visión única del territorio y evitar esto de que cuando son los mismos actores los que hacen los canales y los que hacen los caminos seguramente se van a cuidar muchísimo y van a pensar mucho cuándo tiran el agua hacia un lugar porque se van a perjudicar a sí mismos. En esto estamos también avanzando y siendo pioneros en entender que el territorio es el que manda y no la división política de los territorios, y que tenemos que tener una solución integral para solucionar temas muy complejos.
-Por lo que he entendido, en Córdoba es bastante complicada la parte hídrica.
Martín Alejandro Gutiérrez: Aparte nosotros contamos hacia el oeste de nuestra Provincia con un sector de sierra, luego hay un fuerte corrimiento, tenemos una zona de pedemonte donde tenemos que aplicar las herramientas de conservación de suelos con la construcción de microembalses o terrazas para laminar lo que son las crecidas y luego, en la zona del este de la provincia, de llanuras, las conducciones son claves para la ejecución de canales. Entendiendo la problemática hidrológica y geográfica de nuestra provincia tenemos que trabajar desde el sector público con un trabajo absolutamente coordinado con los diferentes ministerios, que no es algo que se dé en todos los lugares. Nosotros con el Ministerio de Agricultura y con el Ministerio de Servicios Públicos, de quien depende la parte del agua de la provincia, trabajamos de forma conjunta para que todas nuestras obras no se superpongan. Nosotros coordinamos desde el Estado, pero también hemos sumado al sector privado a través de los diferentes consorcios y estamos avanzando a paso firme en este cambio de paradigma donde queremos que se integre y se atienda el territorio siempre en pos de hacer más eficientes los recursos públicos.
-¿Ustedes hacen los proyectos o aprueban?
Martín Alejandro Gutiérrez: Nosotros hacemos los proyectos de Vialidad, de las obras viales. Lo que pasa es que ninguna obra de vialidad sale a licitación si no tiene previamente el visto bueno de parte de la gente de Recursos Hídricos. De esta manera, evitamos problemas futuros con un simple trámite. La continuidad de las políticas públicas dada por los años de gestión de este gobierno hace que sea para nosotros algo natural el trabajar de esta manera. Sabemos que no es lo habitual en otras jurisdicciones, que a veces se sorprenden de la forma que trabajamos acá, pero somos un grupo de gente que nos conocemos hace mucho tiempo y tratamos trabajar de forma coordinada. No hay ninguna obra más importante que otra acá. Todas obras tienen que cumplir con los requisitos que a nosotros nos plantean desde el punto de vista político y que haga un uso eficiente de los recursos y no generen más problemas que los que vienen a solucionar.
-¿La Vialidad está pensando nuevas obras?
Martín Alejandro Gutiérrez: En este momento estamos ejecutando varias. Estamos en una etapa de muchísimo trabajo, en el orden de 150 proyectos con la pavimentación entre lo que es Vialidad y lo que es el Camino de la Sierra, que se encarga de la red de acceso a Córdoba. Al día de hoy, sin agregar obras que tenemos en carpeta, estamos interviniendo en unos 700 kilómetros de la red vial de Córdoba. La red vial pavimentada de Córdoba tiene alrededor de 5 mil 800 kilómetros y nosotros estamos ejecutando unos 700 más. Es decir, al día de hoy sin contar las obras que podamos licitar de acá al año que viene estaríamos terminando la gestión con unos 6 mil 500 kilómetros pavimentados, unos 700 más de los que teníamos anteriormente. Para ponerlo en contexto, hace unas pocas semanas el Jefe de Gabinete del Ministro de la Nación, Manzur, fue al Senado e hizo una exposición donde manifestó que Vialidad Nacional en todo el territorio argentino tenía aproximadamente 1700 kilómetros de ruta en ejecución. Nosotros tenemos 700, o sea que nosotros que contamos en Córdoba con el 5,7% del territorio nacional ejecutamos el 42% de las obras que lleva adelante Vialidad Nacional en todo el país. Realmente la calidad y capacidad de gestión de Córdoba sobresale por lejos por encima de otras jurisdicciones y la jurisdicción nacional. Esto no es casualidad, viene de la mano de una continuidad en el tiempo de las políticas públicas y de un gobierno sumamente austero en el manejo de la cosa pública. Hoy hay una inversión pública en el orden de los 7 mil 500 millones de dólares, de los cuales 5 mil millones de dólares han sido ahorro corriente y los otros 2 mil 500 millones de dólares ha sido endeudamiento por diferentes instrumentos como organismos multilaterales o emisión de bonos, lo que supone e indica que Córdoba gran parte de su plan de obras lo basa en la administración de los recursos públicos. Nosotros como una administración de los recursos podemos llevar adelante un plan de obras así gracias a que administramos los recursos provinciales de una forma austera. Córdoba jamás en la historia ha caído en default, ni aún en 2001 cuando la Nación estaba en default, y por eso es que hoy cuando el gobernador sale de gira por países extranjeros se le ofrece financiamiento directo porque saben que Córdoba es un cliente que paga, es un cliente que si toma un crédito lo devuelve y utiliza los recursos para mejorar la infraestructura. Córdoba a la vez que lleva adelante este plan de obras es la provincia con menor injerencia de empleo público en Argentina, solo el 5% de la población económicamente activa de Córdoba trabaja en el Estado contra un promedio nacional que está en el orden del 12% con picos del 15% o el 20%. Con lo cual, en Córdoba los recursos no se usan para tomar empleados o para hacer populismo con el empleo público sino para brindar obras y servicios públicos a los vecinos.
